Despegue comercial de los drones

Los drones comerciales se preparan para despegar. Hoy, este nicho de mercado apunta principalmente a los aficionados, pero esto cambiará a medida que los países aclaren las incertidumbres legales y las grandes empresas recurran a ellos para cualquier cosa.

Los drones o vehículos aéreos no tripulados han sido usados por los militares y en los últimos años, la demanda de los consumidores ha aumentado a medida que los precios bajaban y la tecnología mejoraba. Los más interesados han sido los amantes de la tecnología y la fotografía. IHS Markit calcula que las ventas de drones alcanzarán los 1.600 millones de dólares en todo el mundo en 2016.

Los negocios también están mirando al cielo. El CEO de Amazon, Jeff Bezos, dio a conocer en 2013 su intención de usar los drones para la entrega de pedidos. Y sus compañeros chinos de Alibaba y JD.com han probado recientemente estas entregas. Las industrias tradicionales de la agricultura, la energía y la construcción están probando formas de usar estos aviones tripulados para todo, desde la exploración de gas y petróleo hasta la reparación de aerogeneradores.

A pesar de la gran promesa, el mercado comercial es pequeño, menos de la mitad del de particulares. Los países aún no han establecido guías claras para su uso comercial, y como los negocios comienzan a usarlos para recoger datos, la privacidad se convertirá en una gran preocupación. Pero el cambio está en marcha. A principios de 2016, el organismo chino de vigilancia publicó el primer conjunto de normas sobre drones y en julio, EE UU introdujo nuevas licencias y requerimientos de seguridad para que las empresas operaran con ellos.

Las ganancias para los fabricantes de drones serán pequeñas al principio, pero llegarán a ser enormes. En China, el mercado comercial de drones será casi tan grande como el de particulares en 2020, según IDC. Los grupos tecnológicos están compitiendo para desarrollar hardware y software. Para la industria de los drones, el cielo es el límite.