Rogelio Ambrosi: “Antes de fin de año decidiremos si Merck abre otra planta en Madrid”

La inversión en España del grupo químico y farmacéutico alemán Merck no cesa. Este lunes, la compañía inauguró una ampliación de su planta de biotecnología en Tres Cantos (Madrid), para lo que han invertido 15 millones en los dos últimos años y que supondrá el aumento de la capacidad en un 50%. En esta instalación se produce la hormona del crecimiento y la de la fertilidad, que se exporta a todo el mundo.

La mayor demanda del producto para la fertilidad en todo el mundo, y sobre todo en China tras el fin de la política de hijo único, ha provocado que esta fábrica deba crecer y adaptarse. Pero puede no ser la única nueva inversión para Madrid. Rogelio Ambrosi (Ciudad de México, 1967), director general de Merck, avanza que la central de Darmstadt decidirá antes de fin de año si se abre una nueva planta en la localidad madrileña.

Pregunta. ¿Qué supone para Merck en España la ampliación de su planta de Tres Cantos?

Respuesta. Supone confirmar que España es un país estratégico para Merck. En 2012, en plena crisis de la industria farmacéutica aquí, se nos preguntaba mucho qué íbamos a hacer, si se iba a reducir la inversión. Pero yo siempre dije que al contrario, que veía una oportunidad para invertir en España. Para mí, significa la confirmación de que la manera de establecerse en un país es mediante este tipo de inversiones. En este caso ha sido una cuantía de 15 millones de euros.

P. ¿Qué otras inversiones han realizado en España?

r. Disponemos de seis plantas en España. Acabamos de invertir 11 millones en la ampliación de nuestra fábrica química en Mollet del Vallès (Barcelona). Además, hemos realizado otra inversión en la planta farmacéutica de Mollet, cercana a los 10 millones, para realizar una mejora y que siga siendo un referente mundial. En esa planta, por ejemplo, hace 10 años el 70% de la producción iba para España y, hoy, el 70% va destinado a la exportación.

P. ¿Valoran nuevas inversiones en España?

r. Se está valorando una nueva planta en Tres Cantos. La actual, incluso con la ampliación inaugurada, está al 100% de capacidad. Estamos evaluando hacer una adquisición de algún terreno y construir una nueva fábrica. Estamos todavía en la evaluación del proyecto que hemos realizado. La compañía a nivel global está totalmente abierta a seguir invirtiendo en España.

P. ¿Un proyecto para qué?

r. Para un producto biotecnológico.

P. ¿Algo diferente a la actual producción de hormonas?

r. Tenemos varios productos, algunos en investigación. Puede ser para nuevos fármacos o para completar la producción en otras fábricas en el mundo. Tenemos también intenciones serias de entrar en el mercado de biosimilares [medicamentos biológicos que entran al mercado cuando los originales pierden la patente]. Las necesidades de la compañía van a incrementarse.

P. ¿Cuándo se tomará esa decisión?

r. Espero que antes de finales de año tengamos una decisión tomada por parte de Alemania sobre si abrir otra planta en Madrid. Yo lo veo positivo. Lo que no tenemos todavía es la cifra de inversión. Debemos comprar el terreno. Y después, hacer la planta dependerá del producto. Todo lo que hagamos será para exportar a nivel mundial.

P. ¿Cómo ve la evolución del sector farmacéutico desde que usted llegó a España en 2012?

r. Hemos mejorado en algunos aspectos, como tener una mejor comunicación con el Ministerio de Sanidad. Hubo una etapa en ese departamento en la que era imposible acceder. Y esto nos abre la puerta a la búsqueda de soluciones. Se ha mejorado también el tiempo en el que un fármaco nuevo llega al mercado, sobre todo comparado con lo que teníamos en 2011 y 2012. Y no es que no haya recortes de precios de los medicamentos, pero hemos avanzado en que haya una mayor claridad y diálogo.

P. ¿Era una cuestión de personas?

r. En el caso particular del Ministerio de Sanidad tenía que ver con las personas. Si hay un diálogo permanente y abierto entre la Administración y la industria las cosas avanzan.

P. ¿Se ha solucionado ese problema?

r. Vamos por el buen camino. Ahora, si vamos a lanzar un fármaco tenemos acceso a un diálogo desde el principio. Antes nos lo anunciaban por carta. Después de todos los ajustes, creo que se ha entendido por parte de las autoridades que no hay mucho más por donde recortar en el mercado farmacéutico. Tenemos que aprender a jugar el partido con lo que tenemos.

P. La falta de Gobierno, ¿cómo está afectando a las empresas del sector?

r. Tener un Ejecutivo en funciones no ha implicado graves riesgos. El problema que tenemos es el de las cuentas públicas. Necesitamos ya disponer de un Gobierno para tener claridad en los Presupuestos. Si las Comunidades Autónomas no tienen unas partidas claras, se puede retrasar el acceso a medicamentos o demorar en los pagos. Para nosotros sí es importante que exista un Gobierno que apruebe unos Presupuestos.