Tu wifi funciona más lenta por el árbol de Navidad
La Navidad llega y, con ella, el árbol que se instala en nuestros hogares. O quizá no haya un árbol para acompañar el período festivo, pero sí adornos y luces que, aunque quizá no lo sabías, están afectando de forma negativa a tu conexión a Internet sin cables. Según estudios llevados a cabo por el regulador británico Ofcom, algunos de los problemas de las redes WiFi en esta época del año se ven justificados precisamente por eso, el árbol de Navidad.
¿Realmente puede el árbol de Navidad afectar a tu WiFi?
La rotunda advertencia del regulador parece algo cómica, pero lo cierto es que sí puede afectar a nuestra conexión a Internet. El problema no tiene que ver con el árbol como tal, sino con las 'barreras' para el WiFi y, en función de sus materiales, el 'potencial de interferencia' que provoca inestabilidad en nuestra conexión a Internet. Y es que, como ya sabemos, hay determinadas obstrucciones absorbentes y reflectantes que afectan a las radiofrecuencias
Como podéis ver en la imagen anterior, los elementos más 'perjudiciales' para nuestra red WiFi son el metal, la escayola, el hormigón y el cristal blindado. ¿Qué tiene que ver esto con nuestro árbol de Navidad? Que está cargado de elementos metálicos que, con un fuerte impacto, afectan a la normal emisión de radiofrecuencias por parte de nuestro router.
Este mismo problema es el que tiene tu red WiFi en relación con los muros y muebles de tu casa, y la introducción de un nuevo elemento que obstruye -el árbol de Navidad- puede provocar interferencias en la conexión, aunque se puede reducir el impacto de una forma muy sencilla, que es configurando correctamente la ubicación del router y el árbol de Navidad.
¿Cómo podemos evitar este problema con el árbol de Navidad y el WiFi?
Lo mejor que podemos hacer para minimizar el impacto negativo del árbol de Navidad sobre nuestra red WiFi es optar por una correcta ubicación del mismo, y en relación con el router. La clave está en no interponer el árbol entre el router y los dispositivos que se conectan a él por WiFi, siempre teniendo en cuenta una relación en línea recta, olvidándonos de los muros que pueda haber entre ellos.
De esta forma, aunque probablemente siga afectando a nuestra red WiFi, la conexión a Internet sin cables y el nuevo elemento navideño en nuestros hogares van a convivir de mejor forma. Y es que, teniendo en cuenta que los elementos metálicos reflejan estas radiofrecuencias, siempre es una mala idea colocar el árbol junto al router, por ejemplo, o simplemente entre el mismo y los dispositivos conectados a él.
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