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Los ingresos por el impuesto sobre la renta superarán por primera vez los 75.000 millones

Montoro presupuesta para 2016 la mayor recaudación por IRPF e IVA

El Gobierno suele pecar de optimismo en sus previsiones de ingresos tributarios El impuesto sobre sociedades se encuentra lejos de la recaudación lograda en 2007

Recaudación de los principales impuestos
Alejandro Meraviglia

Los Presupuestos Generales del Estado para 2016 contemplan que los ingresos de los principales impuestos alcancen máximos históricos. Por el IRPF, Hacienda estima recaudar 75.432 millones, el mayo importe jamás registrado. Lo mismo sucede con el IVA, cuya aportación superará por primera vez los 62.000 millones.

España fue con diferencia el país que más ingresos fiscales perdió al inicio de la crisis económica, una circunstancia que se explica en buena medida por el pinchazo de la burbuja inmobiliaria. La Administración pasó de ingresar el 40,9% del PIB en 2007 al 34,8% en 2009. Es decir, perdió 66.600 millones en solo 24 meses. La respuesta del entonces Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero fue subir los impuestos, una medida que siguió y con mayor intensidad el actual Ejecutivo.

La situación hoy es distinta. La reforma fiscal que entró en vigor en enero incorporó una rebaja del IRPF y del impuesto sobre sociedades. Una reducción que, según las previsiones incluidas en los Presupuestos del Estado que hoy se presentarán en el Congreso, no impedirá que la recaudación por ambas figuras impositivas crezca.

Hacienda, que en los últimos años ha pecado de optimista en la previsión de ingresos, estima que el IRPF aportará a las arcas públicas 75.432 millones en 2016, un 3,4% más que el ejercicio en curso y un 3,8% más que en 2014, cuando los tipos eran más altos. La reducción de gravámenes que entró en vigor en enero, junto con otras variables como la moderación salarial, sí que se reflejan en los ingresos. La recaudación del IRPF, un tributo que grava los salarios, los rendimientos del ahorro y las plusvalías de los ciudadanos, avanzará a un ritmo inferior al PIB nominal, que Economía estima que crezca un 3,8% este año y un 4,1% el próximo. De hecho, la recaudación del IRPF en porcentaje sobre el PIB se situará en 2016 en el 6,6% frente al 6,9% registrado dos años antes. En cualquier caso, los ingresos derivados del IRPF superarán los niveles anteriores a la crisis económica.

Rajoy incorporará la promesa de nuevas rebajas fiscales en su programa electoral

El segundo gran tributo por recaudación es el IVA. Los Presupuestos Generales del Estado prevén que el principal impuesto sobre el consumo aporte a las arcas públicas 62.663 millones, el nivel más elevado en números absolutos registrado en la historia. Además, la recaudación equivaldrá al 5,5% del PIB, un porcentaje que está previsto que se alcance este año y que también es el mayor jamás registrado. Esta situación se explica por las subidas fiscales y la mejora del consumo. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero elevó en 2010 el tipo general 16% al 18% y, el reducido, del 7% al 8%. El actual Gobierno de Mariano Rajoy repitió la medida en 2012 y subió el gravamen general tres puntos hasta el 21% y, el reducido lo fijó en el 10%. Supuso la mayor subida del IVA, un tributo que España empezó a aplicar en 1986. El tipo general de este impuesto se encuentra en la medida europea y el Gobierno no se plantea una rebaja. El aumento del consumo privado y una cierta inflación permitirán que los ingresos por IVA sigan aumentando.

El único de los grandes tributos que no alcanzará su máximo histórico en 2016 será el impuesto sobre sociedades, cuya recaudación se situará en 24.868 millones, un 5,5% más que este año, pero lejos de los 44.823 millones logrados en 2007. Por otra parte, los impuestos especiales, que gravan productos como tabaco, alcohol o hidrocarburos, superarán por primera vez los 20.000 millones de euros. La mejora de la demanda interna también beneficia la recaudación por estos tributos, aunque ciertos productos como el tabaco cada vez se consumen menos.

El Programa de Estabilidad contempla que los ingresos públicos se muevan en torno al 38% del PIB. Para el Gobierno de Mariano Rajoy es un nivel óptimo y asegura que, en caso de que se sobrepase, habrá margen para aprobar nuevas rebajas fiscales.

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