Hacienda asegura ahora que la deuda pública no superará el 100% del PIB
Hacienda estima que la deuda pública cerrará este año en el 98,9% frente al 101,7% estimado hasta ahora
El Programa de Estabilidad 2015-2018 que ha remitido hoy el Gobierno a Bruselas contempla que la deuda pública cierre este año en el 98,9% frente al 101,7% previsto en los Presupuestos Generales. Tras la revisión, Hacienda asegura que el nivel de deuda pública no rebasará ese umbral psicológico del 100% del PIB. De hecho, prevé que el pasivo de la Administración Pública se empiece a reducir a partir de 2016 hasta caer en el 93,2% del PIB en 2018. Se trata de un nivel todavía muy elevado y alejado del objetivo del 60% que impone Bruselas y que España se comprometió a cumplir en 2020 en la Ley de Estabilidad Presupuestaria.
El Gobierno también ha presentado la senda de reducción del déficit público para los próximos años, que incorpora ligeros cambios. Como ya estaba previsto, el conjunto de la Administración deberá reducir sus números rojos del 5,7% del PIB registrado el año anterior al 4,2%. Implica un ajuste de unos 14.000 millones. Hacienda señala que, a diferencia de ejercicios anteriores, el saneamiento de las cuentas públicas se producirá por el incremento de la recaudación generada por la mayor actividad económica. Para 2016, el objetivo de estabilidad no varía y se mantiene en el 2,8%, lo que implicaría cerrar el procedimiento abierto por Bruselas a España por déficit excesivo. Y, para 2017, queda fijado en el 1,4% frente al 1,1% previsto hasta ahora. Ello se debe a que se ofrece mayor margen a comunidades y Seguridad Social. El departamento de Cristóbal Montoro señala que la reforma fiscal, que supuso una reducción de los tipos impositivos en el IRPF y el impuesto sobre sociedades, no lastrarán los ingresos e impulsará el crecimiento económico.
La situación de cada uno de los subsectores que componen la Administración es muy distinta. Así, las comunidades autónomas generan las mayores dudas. Deben cerrar este año con un déficit público del 0,7% frente al desfase del 1,65% registrado el año anterior. Supone un ajuste de unos 10.000 millones. Cumplir el objetivo de déficit resulta simplemente inasumible para la mayoría de autonomías. En cambio, el Gobierno confía en que los ayuntamientos, cuyo objetivo es lograr equilibrio presupuestario, consigan nuevamente un abultado superávit.