¿Se habrán superado los 600.000 nuevos empleos anuales?

El primer trimestre del año suele ser malo para el empleo, pero este año podría no ser así. Los expertos están divididos ante los resultados que arrojará la Encuesta de Población Activa (EPA), que se conocerá mañana y que mostrará las estadísticas oficiales de lo que ha ocurrido en el mercado laboral entre enero y marzo.

Una parte de los analistas consultados esperan que la ocupación apenas retroceda, y otros, los más optimistas, creen que entre enero y marzo el número de ocupados crecerá en un primer trimestre del año por primera vez en la crisis. Es más, entre estos últimos hay quien augura que la creación de empleo será incluso importante, rondando los 200.000 puestos de trabajo más que en diciembre de 2014.

Así, en el mejor de los casos, la EPA de mañana reflejaría lo que ya ha anticipado el registro de afiliación a la Seguridad Social. Los datos corregidos de variaciones estacionales (depurando el efecto de los días hábiles e inhábiles de cada mes) indican que este registro ha ganado 201.036 cotizantes en el primer trimestre del año respecto al último de 2014. Esto ha supuesto que a finales de marzo había 540.920 afiliados que en el mismo mes del año anterior.

Sin embargo, los expertos de la patronal de empresas de trabajo temporal (Asempleo) y de Analistas Financieros Internacionales (Afi) que elaboran el indicador adelantado del mercado laboral, son algo más cautos y estiman que en el primer trimestre del año aún no se creará empleo neto, respecto al trimestre anterior. Si bien "caerá con mucha menos intensidad". Aún así, esta previsión arrojaría que en el último año se habrían creado 522.000 nuevos empleos.

Por eso, si se cumplieran las primeras previsiones, la creación de empleo en términos anuales sería incluso muy superior los 600.000 nuevos ocupados, respecto al primer trimestre de 2014.

Los datos de paro y actividad que se conocerán también mañana son algo más difíciles de predecir. Aún así, el indicador adelantado de Asempleo-Afi prevé que la tasa de desempleo se reduzca con respecto a un año antes en dos puntos porcentuales, situándose en el 23,9%. Si bien, esta tasa aumentaría alguna décima respecto al último trimestre del pasado año.Todo ello siempre que la población activa (gente entre 16 y 65 años en disposición de trabajar) cayera algo menos que hace doce meses, por el menor efecto desánimo producido por la mejora del mercado laboral.

Si la tasa de actividad en lugar de caer aumentara por este mismo efecto, aunque en el primer trimestre del año se creara empleo neto en términos trimestrales, la tasa de paro podría también aumentar. Esto ocurriría si el nuevo empleo que se cree no es suficiente para absorber a toda la nueva población que se pone a buscar empleo (nuevos activos).