Los valores bancarios que relanzan al Ibex a máximos

El Ibex dio ayer un paso atrás después de alcanzar los 11.500 puntos por primera vez en cinco años. El despertar del sector bancario ha sido un motor para sus últimas alzas. La banca tiene un peso superior al 30% en el selectivo español y para recortar la distancia con las fulgurantes revalorizaciones anuales del resto de las Bolsas europeas el índice necesitaba que la banca tirara del carro. Después de un frágil comienzo de año, justificado en parte por la macroampliación de capital de Santander, ahora el sector más importante del mercado continuo del mercado continuo del Ibex cambia el rojo por el verde. En el último mes, en el que el índice sube un 4%, Bankia y CaixaBank avanzan un 9%; BBVA, Santander y Popular, más de un 7%; Bankinter, un 2,9% y Sabadell cae un 3,4% por su opa sobre TSB.

Un primer catalizador han sido los resultados del año pasado. Las cuentas estuvieron en línea o por encima de lo esperado en la mayoría de los casos, mostrando además un resurgir del negocio bancario tras los años de la crisis. Victoria Torre, analista de Self Bank, indica que “los dos grandes bancos han anunciado que su negocio principal vuelve a crecer por primera vez desde hace años, al tiempo que aportan datos positivos de casi todas las regiones del globo”. Los buenos resultados de BBVA y Santander han devuelto la atención de los inversores a ambas entidades. El banco presidido por Ana Patricia Botín cotiza ya un 2,5% por encima del nivel previo al anuncio de la ampliación de capital y se acerca a máximos anuales.

También explica este mejor comportamiento de la banca la tesis generalizada en el mercado de que, a diferencia de lo que ocurría hace años, el posible contagio de Grecia al resto de países de la periferia, y en especial a su sector financiero, es muy reducido. Si a esto se suma el final de las grandes dotaciones de la banca y sus buenas posiciones de capital, así como las mejores perspectivas de crecimiento en España y la reducción paulatina de la morosidad, es lógico que las perspectivas bursátiles para la banca mejoren sustancialmente.

Desde Renta 4 explican que el éxito de la última barra de liquidez para la banca condicionada a la concesión de crédito (TLTRO) frente a lo que esperaba el mercado y que “podría venir explicado por la reducción del coste de financiación hasta 0,05% frente al 0,15% de las dos primeras, es una señal de que los bancos europeos están más dispuestos a prestar”.

Esto nos lleva a otro factor que anima al sector financiero: el Banco Central Europeo (BCE) y su plan de compra de deuda pública a razón de 60.000 millones al mes. Carlos Fernández, analista de XTB, recuerda que “el sector bancario fue uno de los grandes compradores de deuda pública en los peores momentos de la crisis, por lo que están incrementando sus beneficios por la subida del precio de los bonos que provoca el plan de estímulos”.

El mercado también valora que las entidades españolas vuelvan a protagonizar operaciones corporativas para crecer en el extranjero, como el propósito de Sabadell de hacerse con el británico TSB o las pretensiones de CaixaBank y Santander por comprar el luso Novo Banco.Las exigencias de capital, aunque siguen condicionando a las entidades financieras, ya no impiden a los bancos irse de compras.

La dificultad para el negocio bancario de un entorno de muy bajos tipos de interés, el reto de elevar la rentabilidad o posibles tensiones políticas son algunos de los obstáculos que podrían encontrarse unos bancos que este año regresan de forma progresiva al pago del dividendo en efectivo.