Las autopistas de peaje, ¿ayudan o perjudican económicamente?
España no tiene tantas autopistas de peaje si lo comparamos con otros países. Aquí se tendió en la mayoría de los casos a realizar autovías, de sólo dos carriles, pero sin coste directo para el usuario. Aún así hay zonas, especialmente el arco mediterráneo y norte de España donde si hay un gran número de autopistas y donde más se resiente el bolsillo del ciudadano.
En otras zonas el problema es muy distinto. Se intentó crear una red radiales de pago o autopistas paralelas –el caso más paradigmático es Madrid- con el aliciente de así descongestionar las carreteras principales y la crisis con la caída del tráfico ha llevado a que sean un negocio ruinoso que acumula millones de euros de pérdidas. Este problema de rentabilidad ha llevado a que se tomen medidas contrarias como las rebajas en las tarifas para el transporte pesado (camiones) y conseguir mayores beneficios económicos y de seguridad.
¿Qué pasa en el extranjero? ¿Y si no pago?
En el extranjero el cobro de peaje es más común con lo que conlleva un importante coste al que hay que añadir problemas adicionales, como ocurre con Portugal. Un extranjero no sólo se encuentra con el sobrecoste sino con un sistema engorroso de pago (la ida y vuelta en una oficina de correos que está cerrada los fines de semana).
El perjuicio está llevando a que se solicite medidas para cambiar la forma de pago a otras más estándar y universales. Es deicr que se incluyan garitas en todas las autopistas. El problema está en la inversión que conllevaría más cuando habría que cubrir las salidas a un enorme número de poblaciones que rodean los tramos de peaje. ¿Y si no pago? Aunque cobrar una multa es más complicado en el extranjero que si cometemos en nuestra frontera pero existen los mecanismos.
De hecho, se estima que unos 300.000 españoles ha recibido una notificación por impago de las tarifas de telepeaje en Portugal. Se calculó en verano pasado que el total de estos importes suman más de 80 millones de euros. El proceso de reclamación es similar a si no pagamos cualquier deuda o recibo. Una empresa especializada o bufete de abogados se pondrá en contacto con nosotros para intentar que abonemos la deuda de forma amistosa o si no puede emprender acción judicial para este pago. Si tenemos un coche de alquiler suele ser más sencillo. Como con cualquier multa que generemos será la empresa con la que hemos alquilado el coche la que ejercerá acciones contra nosotros. A veces un pequeño ahorro o un despiste nos puede causar un importante quebradero de cabeza.