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Los expertos piden elevar la fiscalidad medioambiental

Cómo lograr 6.000 millones más en tributos verdes

Bruselas también recomienda recurrir con mayor intensidad a impuestos medioambientales Bastaría fijar los tipos en la media europea para recaudar 6.000 millones adicionales

Un conductor reposta en una gasolinera.
Un conductor reposta en una gasolinera. Pablo Moreno

Las cuentas públicas han mejorado sustancialmente en los últimos años, sin embargo, el ajuste pendiente todavía resulta exigente. En los próximos tres años, España debe reducir su déficit del 5,5% previsto para este año al 1,1%. Supone un esfuerzo de 48.000 millones. Un informe publicado ayer por el Instituto de Economía de Barcelona (IEB) aboga por sacar más partido de la llamada fiscalidad verde, es decir, los tributos que gravan productos y consumos contaminantes.

Para los expertos, el margen de recorrido que tiene España en este ámbito es muy amplio si se tiene en cuenta que la recaudación medioambiental se sitúa en el 1,57% del PIB, mientras que países como Alemania o Reino Unido rebasan el umbral del 2%. Mikael Skou Andersen, profesor de la Aarhus University, defiende que bastaría que España se situara en la medida europea para recaudar entre 5.000 y 6.000 millones adicionales. En el fuel ligero para hogares, los impuestos representan el 25% del precio frente al 30%de la media. En el gasóleo de automoción no comercial, la fiscalidad alcanza el 42,4% en España, cuatro puntos por debajo del promedio europeo. En todos los tipos de combustible, la presión fiscal en España se encuentra en niveles inferiores a la mayoría de países europeos.

La reforma fiscal que ha presentado el Gobierno y que actualmente se encuentra en el Senado no incluye medidas significativas en el ámbito de la fiscalidad medioambiental. El Ejecutivo ha desdeñado propuestas como el incremento del impuesto sobre el diésel que había recomendado el comité de expertos liderado por Manuel Lagares. Los sabios elegidos por Montoro defendieron acabar con el “injustificable trato preferencial” del diésel sobre la gasolina.

Una medida que, sin embargo, el Ejecutivo rechaza aplicar para no perjudicar a la incipiente recuperación económica. Además, hay que tener en cuenta que casi el 70% de los coches que se compran utiliza gasóleo. En cualquier caso, Bruselas trabaja con la idea de equiparar los tipos que se aplican al diésel y la gasolina. Todo apunta a que en el corto o medio plazo, la fiscalidad sobre el gasóleo se incrementará sensiblemente.

Por otra parte, los profesores de la Universidad de Vigo Xosé C. Álvarez, Alberto Gago y Xavier Labandeira defienden en el informe que si España se adelantara a la propuesta de directiva de la UE sobre fiscalidad energética podría recaudar entre 1.600 y 8.500 millones adicionales, en función de la intensidad de las medidas.

Hacienda ha pospuesto la reforma de la fiscalidad medioambiental a la espera de modificar el sistema de financiación de las comunidades autónomas, que tienen amplia competencia en este ámbito. Los expertos reclaman poner cierto orden en la fiscalidad regional para evitar las diferencias que se producen actualmente.

Si bien es cierto que elevar la fiscalidad sobre los consumos energéticos puede perjudicar la competitividad, el informe publicado ayer mantiene que ello podría compensarse con reducciones en el IRPF y las cotizaciones sociales. Además, sostienen que elevar los impuestos medioambientales resulta una medida menos regresiva que, por ejemplo, elevar el IVA. Bruselas emitió ayer un informe en el que insiste en la necesidad de elevar los impuestos verdes y recomienda gravar al tipo general del IVA del 21% bienes y servicios que actualmente están bonificados y tributan al 10% o al 4%.

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