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Columna
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Algo de esperanza en Pakistán

Las elecciones de Pakistán pueden suponer un tiro de estabilidad para este problemático país. Los inversores descontarán buena parte de las exageraciones de los partidos políticos sobre las posibilidades económicas del país. La pregunta es si los comicios –la primera transferencia democrática de poder hecha adecuadamente en la historia de Pakistán– pueden ofrecer un liderazgo estable que mantenga al ejército lejos de la política y una al país para hacer frente a la violencia de los talibanes.

El ex primer ministro Nawaz Sharif, de la Liga Musulmana, favorito para liderar el próximo gobierno, ha prometido catapultar la economía paquistaní, más pequeña que la de Nigeria, entre las 10 primeras del mundo. Tehreek-e-Insaf, una formación dirigida por el ex jugador de cricket Imran Khan, quiere elevar tres veces la producción agrícola. El Partido Popular, que gobernó entre 2008 y 2013, ha prometido triplicar el gasto en educación hasta el 4,5% del PIB a finales de la próxima legislatura.

Los políticos no dicen cómo financiarán sus ambiciosos programas. Sin embargo, el FMI, que ha negociado un plan de rescate con el gobierno interino de Pakistán, insistirá en la mejora de las finanzas públicas. Shahid Javed Burki, ex ministro de finanzas, sostiene que ningún partido ha tratado esta importante cuestión en detalle. Situada en el 61% del PIB en junio del año pasado, la deuda del gobierno equivale ahora a cinco veces sus ingresos anuales.

El rayo de esperanza proviene de un cambio constitucional producido en abril de 2010 que eliminó la mayoría de los poderes del presidente y se los transfirió a los ministros elegidos por sufragio directo, que son responsables ante el Parlamento. Eso podría marcar el fin del enfoque de “hombre fuerte” que ha dominado la política de Pakistán, asegura Burki. Pero incluso si el próximo gobierno logra estabilizar la economía, la tarea de reestablecer la paz, la seguridad y el estado de derecho constituirá la verdadera prueba de fuego del futuro primer ministro.

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