BBVA respalda un 'banco malo' para otras entidades

BBVA tendió ayer una mano a la creación de un banco malo. Tras años de señalar con el dedo los desmanes de las cajas, la segunda entidad española se mostró posibilista ante los planes del Gobierno de traspasar a una gestora inmobiliaria los activos adjudicados en los balances de las entidades financieras que paralizan la concesión de crédito y constriñen el desarrollo económico de España.

"Hay entidades -como nosotros- a las que no les hace falta un banco malo para gestionar ese tipo de activos, pero para el resto es distinto", apuntó ayer Ángel Cano, consejero delegado de BBVA. Luego desarrollaba la idea. "Hay que crear una respuesta para cada firma. Todo lo que contribuya a aislar el efecto negativo en los balances de las entidades será bueno desde el punto de vista del mercado y ayudará a desprenderse de los activos inmobiliarios".

BBVA se siente capaz de lidiar solo con los pisos, locales, naves y solares que han entrado en su balance. La entidad vendió entre enero y marzo 1.000 viviendas entre clientes minoristas. El grupo prefiere no traspasar lotes de activos a inversores institucionales por los fuertes descuentos que exigen, si bien no descarta acometer una operación de este tipo en el segundo semestre. BBVA cuenta con un volumen bruto de inmuebles adjudicados de 8.249 millones.

En contraste con CaixaBank y Bankinter, que han decidido asumir el saneamiento del ladrillo impuesto por el Gobierno de golpe, el segundo banco español acometerá la labor sorbito a sorbito. "Debemos sanear el balance acompasadamente durante el segundo, tercer y cuatro trimestre por la normativa", dijo Cano. En el primer trimestre ha destinado a esta finalidad 174 millones, de los 2.400 millones que le supone la factura del real decreto.

La entidad cosechó unas ganancias de 1.005 millones de euros al cierre de marzo, un 12,6% menos que en el mismo periodo de 2011. La acción repuntó ayer en Bolsa un 2,21% en una jornada en la que el Ibex subió un 1,70%.

Los responsables de BBVA destacaron la capacidad de la entidad de generar ingresos recurrentes en las distintas regiones donde opera, al tiempo que cumple con los requisitos de capitalización impuestos por la Autoridad Bancaria Europea (ABE) sin desprenderse de ningún activo estratégico.

Las áreas más dinámicas fueron Eurasia y Sudamérica. Sus ganancias atribuidas repuntaron un 51,7%, hasta 299 millones, y un 27,1%, hasta 370 millones, respectivamente. BBVA eludió todo gesto brusco al hablar de la expropiación de YPF de Repsol. Su consejero delegado se limitó a declarar que "respaldamos la seguridad jurídica en todos los países". Cano describió BBVA Francés, su filial en aquel país, como "rentable y eficiente". Ganó 58 millones hasta marzo.

En EE UU, el grupo opta por un incremento selectivo de la inversión y una mejora del mix del pasivo. El beneficio de esta unidad creció un 15,6%, hasta 115 millones. México continúa siendo la joya de la corona, al generar un resultado de 430 millones, un 3,6% más. El área de banca de inversión redujo, en contraste, su aportación. Ganó 279 millones, un 18,7% menos.

Casi toda la presentación de Cano giró en torno a España. El mercado doméstico se encuentra en el ojo del huracán que azota a las emisiones de deuda soberana. El propio directivo reconoció que "no es soportable que la prima de riesgo continúe mucho tiempo por encima de los 400 puntos".

Caída del PIB del 1,3%

El consejero delegado reclamó "tiempo para que se vea el resultado de las reformas emprendidas en el país". Cano alabó especialmente la nueva ley del mercado de trabajo. Afirmó que esta "deja al mercado laboral español como uno de los más flexibles de Europa" y vaticinó que el texto otorgará "cuatro puntos de crecimiento económico en los próximos cuatro años". El servicio de estudios de BBVA espera que el PIB caiga un 1,3% este y que la economía nacional crezca a partir del próximo ejercicio.

A juicio del consejero delegado de BBVA es esencial que el Estado cumpla con los objetivos de déficit acordados con la UE para este ejercicio. Consideró que en ello se debe aplicar tanto la Administración central como las comunidades autónomas. Cano admitió de forma velada la posibilidad de que se produzca una subida del IVA al recordar que el Gobierno todavía dispone de palancas presupuestarias a su disposición para alcanzar la meta comprometida.

España aportó un 16% del beneficio del grupo tras sufrir el resultado de esta división una caída del 52,2%, hasta 229 millones. Los gestores del banco consideran que este peso debería aumentar en 2013 y 2014 y descartaron que el negocio en España anote pérdidas ningún trimestre.

BBVA consideró imperativo que la reestructuración del sector bancario concluya este año. "No hay más tiempo", sentenció Cano. Tras adjudicarse Unnim, el grupo se mostró dispuesto a protagonizar nuevas compras si "genera valor" para el grupo. En breve comenzarán las subastas de Catalunya Caixa y Banco de Valencia.

El segundo banco del país sitúa su ratio de mora en España en el 4,9% con una cobertura del 43%. Cano indicó que los impagados del sistema seguirán creciendo hasta el primer trimestre de 2013 debido, sobre todo, a los incidentes en créditos a empresas. Los impagados entre particulares están estables.

Cano afirmó que BBVA mantendrá la retribución al accionista en tanto en cuanto se mantengan unos resultados sólidos. El ejecutivo también denunció que la acción del banco "es utilizada para especular solo porque cotiza en la Bolsa española".