España esgrime todos los argumentos
Sol y playa, pero también cultura, naturaleza o gastronomía... Los atractivos son diversos.
Que las playas españolas son un reclamo turístico de excepción resulta evidente. Que éstas ofrecen una paleta de opciones variopintas, también. Casi 8.000 kilómetros de costa y dos archipiélagos -las islas Baleares y las Canarias- albergan alternativas para dar y tomar, que van desde el exotismo de las pequeñas calas o islotes poco transitados hasta las zonas para practicar el surf. Pero España es más que sol y playa y en los últimos años ha quedado muy patente. Todas las regiones -sobre todo las que están ubicadas en el interior- han trabajado con vehemencia para exaltar otros atractivos. El patrimonio artístico y cultural, la riqueza gastronómica, los enclaves naturales... todas las vertientes posibles han ampliado el argumentario del país.
Andalucía da buena cuenta de la diversidad. A las playas, añade un catálogo de pueblos con encanto alejados del litoral y variados tesoros artísticos en zonas urbanas -la Alhambra de Granada, la Mezquita de Córdoba o la Giralda de Sevilla son de visita obligada para los turistas-. Este año la comunidad presenta además un nuevo proyecto, Guadalquivir Turístico, en el que el río actúa como un elemento vertebrador del turismo por el interior, desde la sierra de Cazorla hasta Sanlúcar de Barrameda. Los deportes extremos o de aventura también encuentran en esta región un buen elenco de posibilidades. Mientras miles de aficionados al surf se dejan caer con el estío por Tarifa, en invierno otros tantos acuden a Sierra Nevada a esquiar.
Aragón, a su vez, ofrece más de 348 kilómetros de pistas para la práctica de este deporte. Siete estaciones con una capacidad para 140.000 esquiadores son un señuelo al alza.
Asturias, Paraíso Natural. Con cinco Reservas de la Biosfera catalogadas por la Unesco, la región exhibe una riqueza única. Las rutas gastronómicas son otro de los valores del Principado. El recorrido Saboreando Asturias, Rutas de los Alimentos del Paraíso (presente en Fitur) recoge cinco itinerarios protagonizados por los quesos Afuega'l Pitu, Cabrales y Casín, la sidra de Asturias y el vino de la Tierra de Cangas.
Baleares y Canarias reúnen algunas de las opciones de playa más exclusivas. Formentera, por ejemplo, ejerce como un reducto casi virgen. En el archipiélago canario, Volcanic Experience aglutina las alternativas de turismo de aventura, mientras que Water Sports Experience resalta las bondades de las islas para los deportes náuticos.
La herencia del Paleolítico es la joya de Cantabria, que cuenta con magníficos exponentes de arte rupestre en sus cuevas. La gruta de El Soplao y el recorrido Las otras Sixtinas (por las diez cuevas reconocidas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad), fueron premiados en la pasada edición de Fitur. También las cuevas de Ekain, Altxerri y Santimamiñe constituyen el atractivo arqueológico del País Vasco, aderezado por otras ofertas de interés como las construcciones medievales que pueblan la zona.
El viaje cultural adquiere su máxima expresión en el centro de España. En Castilla-La Mancha, la tradición artesana y popular aglutina parte importante de la oferta. Destacan, asimismo, las rutas literarias que transitan por los parajes que habitan las páginas de Don Quijote de La Mancha o el Cantar de Mío Cid. Castilla y León, por su parte, conmemora este año el undécimo centenario de la creación del reino de León, ensalzando sus monumentos y el valor de sus fiestas. Las tierras castellanoleonesas estarán llenas en 2010 de peregrinos hacia Santiago de Compostela (Galicia) que vive el Año Xacobeo.
Además de esta ciudad, la comunidad gallega alberga otros lugares declarados Patrimonio de la Humanidad, como la Muralla Romana de Lugo y la Torre de Hércules y hace alarde de su opulencia gastronómica. También La Rioja sobresale por sus virtudes culinarias y, cómo no, por sus vinos. Alrededor de la enología se articulan experiencias, visitas y estancias en bodegas.
La Ruta de Hemingway que discurre por los bares y pensiones de Pamplona o la de La Brujería (por la comarca de Sangüesa y Lumbier hasta Améscoa) son parte de la propuesta de Navarra. Comunidad Valenciana y Murcia son destinos tradicionales de playa, pero amplían el repertorio con propuestas como la Ciudad de las Artes y las Ciencias (en Valencia) o el legado de la Roma de Augusto que ostenta Cartagena (en Murcia). En esta última región, asimismo, destaca la celebración este año del Año Jubilar en Caravaca de la Cruz.
Extremadura ha encontrado en los balnearios y las aguas termales una de las vertientes más seductoras de la zona, junto con los trayectos culturales como la Vía de la Plata. La naturaleza y el patrimonio cultural son asimismo el mejor cóctel para el turismo en Cataluña. Madrid, por su parte, cuenta con sus pueblos pintorescos y los alicientes que atesora la capital.