El PP respalda a Camps y fuerza la dimisión de los ediles de Pozuelo y Arganda

El alcalde madrileño de Pozuelo de Alarcón, Jesús Sepúlveda, se vio obligado a dimitir el viernes, un día después de que el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón lo implicara en el caso Gürtel, la trama de corrupción que ha salpicado a cargos del PP en Madrid y la Comunidad Valenciana. Dos horas antes, el alcalde de Arganda del Rey, Ginés López, también en Madrid, dimitía por el mismo motivo, haciendo buenas las tesis de la dirección del PP, proclives a depurar responsabilidades internas. Según el auto de Garzón, ambos alcaldes, habrían recibido dinero en operaciones con Francisco Correa, el líder de la presunta trama que se encuentra en prisión.

Garzón indica que Sepúlveda, que desde 2003 era alcalde de Pozuelo, recibió 422.922 euros procedentes de la trama. López, por su parte, habría ingresado 1,3 millones. Sin embargo, el viernes Garzón rectificó y rebajó esa cifra hasta 523.439 euros. Según Garzón el error se produjo porque se incorporaron dos veces 'las distintas partidas de cantidades percibidas', por el alcalde de Arganda del Rey.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal anunció, con el objetivo de alejar a su partido de la trama, la suspensión de militancia de todos los afiliados al PP que aparecen en los autos del juez Baltasar Garzón en el caso Gürtel, (incluidos Sepúlveda y López), pero exceptuando Francisco Camps, presidente de la Comunidad Valenciana, y el secretario general del PP valenciano, Ricardo Costa.

Horas más tarde, el PP de Madrid aclaró que los tres diputados madrileños imputados por Garzón, Alberto López Viejo, Alfonso Bosch y Benjamín Martín Vasco, tampoco están suspendidos.