La revolución silenciosa de la gestión
Cuando se mira hacia atrás se puede observar la profunda transformación de la economía y de las empresas españolas en estos últimos 30 años. Unas empresas que se han modernizado y que hoy, en algunos sectores, son punteras internacionalmente. En este proceso de cambio de nuestro tejido empresarial ha sido decisivo poder contar con profesionales competentes y preparados para poder gestionarlas adecuadamente.
La formación de directivos profesionales ha evolucionado históricamente en España al mismo ritmo que los retos de gestión de las empresas. El management es un conjunto de conocimientos extraordinariamente dinámico y en constante desarrollo, que avanza estrechamente vinculado a la evolución de las necesidades del mundo empresarial. Veamos algunos momentos históricos, a manera de ilustración, de esta evolución del management.
A finales de los años setenta en España el contexto competitivo de muchos sectores empresariales era de una fuerte demanda y una competencia limitada, lo que hacía que el foco principal de atención de los directivos se dirigiese hacia la modernización de los procesos de producción y al control económico y financiero. En esta época los cursos de producción y finanzas eran los más solicitados. Por otro lado, la progresiva entrada de empresas extranjeras y el aumento de la oferta propició que surgiesen con fuerza el marketing y las técnicas de venta.
El auge de los nuevos canales de comunicación, especialmente la televisión, aumentó la necesidad de mayor profesionalización y creatividad en el ámbito de la publicidad y el diseño de las marcas y productos. Las sucesivas innovaciones tecnológicas, especialmente la informática, han sido metabolizadas por las empresas españolas y han aparecido sistemas de información que han modernizado extraordinariamente la gestión empresarial en nuestro país, desde la contabilidad hasta el control de la producción, pasando por las terminales de los puntos de venta o las bases de datos de clientes. Una gestión que cada vez se sofisticaba más y que buscaba mejorar la calidad en todos los procesos.
Durante estas tres décadas hemos asistido tanto a procesos de fusiones y adquisiciones importantes como al surgimiento de empresarios emprendedores que han creado empresas que hoy son jugadores importantes a nivel internacional. Cada vez más, las empresas españolas han optado por la internacionalización como estrategia de crecimiento, y algunas han buscando su financiación a través de salidas a Bolsa.
En los últimos años ha crecido la importancia de los recursos humanos en las empresas. Desde las tradicionales funciones de administración de personal se ha evolucionado hacia la gestión del talento, cuya misión es saber reclutar, retener y desarrollar la carrera profesional de las personas que forman parte de la organización. Unas empresas que quieren ser socialmente responsables, que se esfuerzan por ser transparentes y que se implican en proyectos de la comunidad, a través del patrocinio y el mecenazgo.
Si un directivo de hace 30 años asistiese hoy a una clase de MBA, seguramente le resultaría muy difícil de seguir, pues la renovación de conceptos y herramientas acontecida en este periodo ha tenido un alcance casi general. La evolución del management ha sido una verdadera revolución, pero se ha realizado sin hacer mucho ruido mediático. Otra revolución silenciosa que ha ocurrido durante estos años es que las técnicas de gestión empresarial se han extendido y diseminado por otras organizaciones. Hoy en día desde los hospitales hasta las organizaciones sin ánimo de lucro utilizan técnicas y herramientas de management.
Podríamos decir que el management en estas tres últimas décadas ha entrado en la gestión de las organizaciones y se ha convertido en un elemento de modernización social, de una forma discreta y poco reconocida. Se trata de una revolución silenciosa, pero que tiene una gran profundidad y relevancia social. Las escuelas de negocios se han globalizado y han aumentado su nivel de competencia. Como hemos visto, se trata de un campo de conocimiento tremendamente dinámico, donde la generación de conocimiento a través de la investigación y su difusión por medio de la docencia requiere de organizaciones con un alto sentido de excelencia académica y de profesionalidad.
Que nuestras escuelas de negocios hayan logrado entrar a formar parte del grupo de las más reconocidas internacionalmente puede ser uno de los factores que expliquen esta revolución silenciosa de la gestión que hemos vivido en España y un factor que puede ayudar a nuestras empresas a afrontar en mejores condiciones los retos de futuro que nos deparará el siglo XXI.
Marcel Planellas. Profesor y secretario general de Esade