La tasa de paro de los jóvenes se dispara al 15% en el primer trimestre
La tasa de paro de los jóvenes menores de 30 años se ha disparado en el primer trimestre del año a valores superiores al 15% por la crisis económica, al ser los empleos más frágiles y débiles los que antes se destruyen en una coyuntura como la actual.
Estos datos fueron facilitados en rueda de prensa por el profesor de la Universidad Complutense de Madrid Esteban Sánchez y por el presidente del Consejo de la Juventud de España, Daniel Lostao, durante la presentación del último boletín del Observatorio Joven de Empleo (Objovem).
El hecho de que la tasa de paro de los jóvenes haya repuntado más de un 15% en el primer trimestre supone una ¢modificación sustancial¢ sobre lo ocurrido en 2007, un año que se mostró bastante estable para el empleo juvenil. Dicho ejercicio cerró con una tasa de desempleo entre los jóvenes del 13,8%, con un crecimiento de apenas ocho décimas respecto a principios de año.
Sin embargo, en 2008 el panorama ha cambiado. La tasa de paro juvenil ha subido más de un punto en el primer trimestre si se compara con el cierre de 2007 y dos puntos si la comparación se hace con la tasa existente un año antes (13%).
Entre las mujeres, la tasa de desempleo ha sobrepasado el 17% en el primer trimestre, frente al 16,3% del cuarto trimestre de 2007. Este porcentaje supera en cinco puntos el paro de los jóvenes varones (11,8%) y en más de ocho el de la tasa de desempleo general (para cualquier edad).
La subida del paro juvenil en los primeros compases del ejercicio fue mayor entre los jóvenes extranjeros, circunstancia que puede deberse a que su presencia es más numerosa en el sector de la construcción, uno de los motores de la desaceleración económica que vive España.
La razón de este incremento del paro en el colectivo juvenil, según el profesor Sánchez, se halla en que en momentos de crisis económica, los primeros en sufrir las consecuencias son aquellos trabajadores que tienen empleos más frágiles, entre ellos los jóvenes. De hecho, es un colectivo desfortudamente 'acostumbrado' a la temporalidad y con sueldos 'mileuristas', por lo que despedirlos les sale más barato a las empresas.
El estudio revela además que las tasas de paro de los jóvenes son inferiores entre aquellos que han cursado formación profesional de grado superior, con menos de un 10% entre las mujeres y un 5,6% entre los varones, la tasa más baja de todos los tramos educativos.
Desciende levemente la temporalidad
Lo curioso es que mientras el paro sube, la temporalidad juvenil baja. A finales de 2007, más de los mitad de los jóvenes menores de 30 años, en concreto el 50,6%, tenía un contrato temporal, tasa que ha descendido unas décimas en el primer trimestre. La explicación para ello es que, al ser una proporción, si se destruye empleo temporal, aumenta el peso de los indefinidos. También podría haber influido en esta variación la reforma laboral aprobada por el Gobierno en la legislatura pasada y que tenía por objeto mejorar la estabilidad laboral.
Si la temporalidad de los jóvenes en el sector privado es elevada, la del sector público no se queda atrás. Al término del año pasado, la tasa de temporalidad de los jóvenes varones que trabajan para las administraciones públicas era del 52,1%, porcentaje que repunta hasta el 69% en el caso de las mujeres. Así, el cuarto trimestre de 2007 fue el cuarto consecutivo en el que casi tres de cada cuatro mujeres jóvenes empleadas en el sector público tenían un contrato temporal.
Otro dato destacado por Sánchez es que un 8% de los jóvenes no sabe qué tipo de contrato ha firmado (entre la población general la cifra baja al 3%), situación que tanto el profesor como el presidente del CJE atribuyeron a la desinformación, al complejo y numeroso grupo de contratos temporales existentes y a los encadenamientos de contratos que padece el colectivo (algunos jóvenes llegan a tener hasta cuatro contratos temporales en un año).
El empleo juvenil se concentra especialmente en el sector servicios, con un 64,9% de ocupados, porcentaje que entre las mujeres alcanza el 85,4%. Le sigue el sector industrial, con un 16%, la construcción (15,8%) y la agricultura (3,3%).
En materia retributiva, Sánchez explicó que el salario medio de los jóvenes se encuentra aproximadamente en 1.100 euros mensuales. Las mujeres jóvenes ganan una media de 1.000 euros y los hombres de su misma edad perciben 1.200 euros. Esta brecha salarial es lo que empuja en parte a que el 11,1% de las mujeres jóvenes se pongan a buscar otro empleo pese a tener ya una ocupación.
Ante este mapa del empleo juvenil que dibuja el Objovem, el presidente del Consejo de la Juventud de España reclamó la puesta en marcha de políticas que incidan de manera efectiva en la no discriminación, el derecho a la igualdad y el fomento de la formación cualificada.