Rato busca posibles interesados para vender Banco de Valencia
Otra entidad financiera más en el mercado para su venta, Banco de Valencia. La crisis por la que atraviesa el banco levantino ha llevado al presidente de Bankia, Rodrigo Rato, a llamar a algunos bancos y cajas que puedan estar interesados en su compra para ofrecerles la entidad en la que controla el 38%.
Una nueva complicación para la venta de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). La crisis de Banco de Valencia, filial de Bankia, ha llevado al grupo que preside Rato a buscar soluciones para la entidad levantina, que pasa incluso por su venta tras su saneamiento.
Hace unos meses Bankia ya puso en el mercado este banco, pero no consiguió atraer a ningún posible comprador. El elevado riesgo al crédito promotor y el precio que se pedía frenó cualquier potencial oferta. Pero ahora el panorama ha cambiado y el tercer grupo financiero español tiene más urgencia que antes en desprenderse de su filial.
Rato ha tomado la iniciativa en este proceso y se ha puesto en contacto con posibles compradores. Pero para hacer atractivo Banco de Valencia tiene antes que sanearlo y recapitalizarlo. Por ello, su venta podría producirse a principios del próximo año, ya que antes el Banco de España debe finalizar la inspección que realiza en la entidad desde hace un año, y que será la que determine su agujero y por lo tanto sus necesidades de capital. Varias fuentes cifran en más de 800 millones de euros el déficit de provisiones de Banco de Valencia. De ser así, Bankia debería aportar unos 250 millones de euros al capital tras su ampliación, que corresponde a la participación que ostenta directamente, un 27,5%, aunque controla en total un 38% con otros socios.
El FROB podría cubrir el resto de la ampliación, aunque si se consigue un comprador la vía para recapitalizarse podría variar. Eso sí, todos los posibles compradores piden una limpieza del balance del banco. En caso contrario no tendría ningún atractivo. Banco de Valencia tiene una exposición al sector de la construcción y promotores de 3.107 millones de euros.
El 65,8% de su riesgo está precisamente vinculado al ladrillo (construcción y promotores), un porcentaje muy alto y el causante de la crisis del banco, como también lo ha sido de CAM.
Fuentes financieras aseguran que si se limpia el balance de Banco de Valencia de activos tóxicos. "se convierte en una entidad muy atractiva para su posible compra. No hay que olvidar que hay varias entidades interesadas en CAM por su ubicación geográfica, con lo que pasaría lo mismo con el banco levantino".
Entre los interesados en crecer en la comunidad autónoma valenciana están Santander, a través de Banesto, BBVA, Sabadell, CaixaBank, Barclays o en menor medida Ibercaja si se tiene en cuenta las entidades que han presentado oferta por CAM.
Las cifras
250 millones de euros debería aportar Bankia a la ampliación de capital de Banco de Valencia. El FROB podría cubrir el resto.800 millones de euros es la cantidad a la que podría ascender el déficit de capital de la entidad valenciana.66% es el porcentaje del riesgo del banco levantino que está vinculado al ladrillo (construcción y promotores).
Las ventajas contables de una integración
Una idea que ha barajado Bankia, e incluso el Gobierno, es que la recapitalización de Banco de Valencia se pueda llevar a cabo a tres bandas, es decir, con aportación del grupo que preside Rodrigo Rato, el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y otros inversores.Pero los posibles interesados en el banco descartan esta fórmula, explican varias fuentes financieras, que añaden que los más interesados en Banco de Valencia son Banesto, Sabadell y Barclays.Y recuerdan que Banco Sabadell ya estuvo hace meses estudiando los datos de la entidad levantina. Ahora la capitalización de Banco de Valencia es más asequible dado lo que ha bajado en los últimos meses. Desde el pasado lunes, día en el que se conoció la delicada situación de la entidad, sus acciones han perdido el 15,52% de su valor en Bolsa.Lo lógico es que si finalmente los posibles interesados formulan una oferta sean ellos quienes recapitalicen el banco vía de una ampliación de capital, pero con el pago en acciones. Además, parte del saneamiento se realizaría a través de la fusión de las dos entidades, lo que permitiría como en el caso de Banco Popular y Banco Pastor, generar recursos propios que irían directamente a provisiones.Ayer el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, no pudo evitar referirse a la crisis de Banco de Valencia, que puede convertirse en el primer banco español que acuda a las ayudas públicas para recapitalizarse.Y eso que en 2008 todos los socios de la AEB "juramos que jamás pediríamos ayudas públicas, que resolveríamos nuestros problemas por nuestros propios medios", dijo Miguel Martín en el Forum Nueva Economía.