PSA y Mitsubishi negocian crear el sexto mayor grupo de coches
Las dificultades que atraviesan los grandes fabricantes de automóviles sigue acercando a rivales para aunar esfuerzos. Ayer, PSA Peugeot Citroën confirmó que negocia un acuerdo estratégico con Mitsubishi, con la que ya mantiene una alianza industrial. La francesa podría tomar el 50% del capital y daría lugar al sexto mayor grupo automovilístico del mundo.
El baile de acercamientos entre rivales en la industria de la automoción vivió ayer el último capítulo. PSA Peugeot Citroën, el primer grupo automovilístico francés, confirmó que ha iniciado conversaciones con Mitsubishi "al objeto de examinar conjuntamente las vías posibles para ampliar su relación, lo que podría conducir a una alianza estratégica". La iniciativa podría dar lugar incluso a la compra de hasta el 50% de la empresa nipona por la multinacional gala. Los mercados no acogieron con excesivo agrado la noticia y la cotización de PSA cayó el 2,5%.
Ambas compañías son ya viejas conocidas. Mitsubishi fabrica para PSA los todoterrenos Peugeot 4007 y Citroën C-Crosser, basados ambos en la plataforma del Outlander. Las dos marcas del grupo francés venderán en Europa a partir de 2011 un coche eléctrico basado en el Mitsubishi i-Miev (uno de los escasos vehículos de este tipo que ya están disponibles). Por último, ambas compañías (con un 70% del capital aportado por PSA y el resto por la asiática) están construyendo una factoría en la ciudad rusa de Kaluga, a 180 kilómetros de Moscú, que tiene previsto fabricar a partir de 2011 modelos del segmento C (del estilo del Colt o el C4) y todoterrenos de tamaño medio. No son éstas, en todo caso, las únicas relaciones que mantiene la empresa presidida Philippe Varin con rivales asiáticos. La multinacional produce con Toyota en Kolin (República Checa) los modelos Citroën C1, Peugeot 107 y Toyota Aygo, tres modelos trillizos diferenciados únicamente por la marca y otros detalles externos. En Europa, PSA colabora con BMW en el desarrollo y fabricación de motores de gasolina.
Socio ideal
El diario económico japonés Nikkei avanzó que PSA estaría dispuesto a desembolsar hasta 300.000 millones de yenes (unos 2.280 millones de euros) para adquirir una participación de entre el 30% y el 50% en Mitsubishi.
La portavoz de la compañía francesa, Liliane Lacourt, aseguró a Bloomberg en cambio que las conversaciones aún se encuentran en una fase "exploratoria". Diversos analistas aseguraron ayer que Mitsubishi podría ser un "socio ideal".
Los matrimonios fallidos de la multinacional nipona
La búsqueda de alianzas y fusiones no es, obviamente, nueva en la industria. De hecho, PSA está formada tras la fusión de Peugeot y Citroën entre 1974 y 1975. Mitsubishi, el séptimo fabricante japonés, también ha protagonizado operaciones. Fallidas, en su caso. El ex presidente de la entonces DaimlerChrysler, Jürgen Schrempp, pretendió convertir la corporación alemana en un imperio e invirtió más de 2.000 millones de dólares en comprar hasta un 37% de la japonesa entre 2000 y 2001. Los fallos de fabricación y la ocultación de defectos hundió a Mitsubishi y a la alianza, que se finiquitó en 2005. La compañía perdió 9.968 millones de yenes (74,6 millones de euros) en el tercer trimestre.